Había escuchado la llamada de Dios al sacerdocio, la había seguido con alegría, y era sacerdote en una de las parroquias más vivas de Madrid, pero el miedo a la soledad se hacía cada vez más pesado y le paralizaba, le angustiaba y no veía solución, pero un día se sintió llamado a acudir a una Efusión del Espíritu Santo. Vencidos sus recelos, fue y lo que allí sucedió le transformo y le libro de sus angustias. Desde entonces el P. Juan Luis Rascón no tiene miedo a la soledad ni a evangelizar, buscando cada día como abrir caminos al Señor en su barrio de Madrid.
Hace pocos días Merche veía el rostro de Juan y, aunque es su decimosexto nieto, lo ha vivido llena de agradecimiento a Dios y con mayor ilusión si cabe que los anteriores. Merche, madre de seis hijos y viuda desde hace siete años, nos habla de su vida llena de bendiciones, en que lo mejor ha sido conocer a Jesús y vivir en Su Iglesia.
En Santos de andar por Casa conocemos, de la mano del P. Alberto Royo, a Santiago Mosquera que a los 16 años dio su vida por Cristo al no querer blasfemar.