En el programa de hoy continuaremos el segundo capítulo del libro y comenzaremos el tercero. Durante los dos primeros capítulos San Alfonso María Ligorio nos ha ido hablando sobre qué es la oración y la necesidad que tiene el hombre de ella. Solo por las gracias que Dios nos concede, alcanzamos la santidad, con la oración no sólo alcanzamos los dones necesarios sino que nos preserva y salva para seguir el buen camino. En el capítulo tercero nos habla de la oración de intercesión; el rezar los unos por los otros, encomendarse a los santos..., pero insiste y profundiza con las almas del purgatorio pues entre estas almas sufrientes y nosotros pueden establecerse unos vínculos de caridad muy especiales y muy agradables a Dios.