Propongo el "pacto de 40 días" para vivir esta Cuaresma, muriendo a nosotros mismos. Y el mejor modo para ello es amar al prójimo, tratando de poner en práctica, por la gracia de Dios, las obras de misericordia corporales y las espirituales.
40 días
Propongo el "pacto de 40 días" para vivir esta Cuaresma, muriendo a nosotros mismos. Y el mejor modo para ello es amar al prójimo, tratando de poner en práctica, por la gracia de Dios, las obras de misericordia corporales y las espirituales.