Nos relata el P. Guillermo una anecdota de S. Juan XXIII, en que un obispo le dijo al papa que desde su nombramiento no podía dormir, a lo que el santo Padre contesto: Eso mismo me ocurría a mi, hasta que se me apareció mi angel de la guarda y me dijo: "Geovani, no te consideres tan importante".
Dios es el que lleva la Iglesia.
¿Cuantas veces queremos ocupar el lugar de Dios? Nuestra nave la lleva Dios
Angel custodio
Nos relata el P. Guillermo una anecdota de S. Juan XXIII, en que un obispo le dijo al papa que desde su nombramiento no podía dormir, a lo que el santo Padre contesto: Eso mismo me ocurría a mi, hasta que se me apareció mi angel de la guarda y me dijo: "Geovani, no te consideres tan importante".
Dios es el que lleva la Iglesia.
¿Cuantas veces queremos ocupar el lugar de Dios? Nuestra nave la lleva Dios