El sacerdote según el cura de Ars.
Cura de Ars
Sexto día de la Novena a San Juan María Vianney, el Santo Cura de Ars.
Primer día de la Novena a San Juan María Vianney, el Santo Cura de Ars.
Hablamos de la vida de oración el Santo Cura de Ars, patrón de sacerdotes y párrocos, pastor según el Corazón de Cristo. Con música de Iesu Communio.
SAN JUAN BAUTISTA Mª VIANNEY (Memoria Obligatoria):
1.) Necesidad de sacerdotes santos. Dignidad incomparable. Amor al sacerdocio;
2.) Necesidad del sacerdote. Oración y mortificación por los sacerdotes;
3.) El sacerdote, en nombre del Señor, acompaña la vida del hombre. Aprecio por quienes tanto nos han dado. Confiar mucho en la oración del sacerdote.
Hoy se celebra la festividad de S. Juan María Vianney, el cura de Ars, patrono de los sacerdotes.
Es de destacar el gran don de la predicación y de la confesión, pero al P. Guillermo lo que más le llama la atención de este santo es su humildad.
Cuando se está muy cerca de Dios, y cuanto más cerca se está de de su Luz, más se ve nuestra maldad, pero no para vivir tristes, sino para afianzarnos en la confianza en el Amor y la Misericordia de Dios.
El sacerdote según el cura de Ars.
Sexto día de la Novena a San Juan María Vianney, el Santo Cura de Ars.
Primer día de la Novena a San Juan María Vianney, el Santo Cura de Ars.
Hablamos de la vida de oración el Santo Cura de Ars, patrón de sacerdotes y párrocos, pastor según el Corazón de Cristo. Con música de Iesu Communio.
SAN JUAN BAUTISTA Mª VIANNEY (Memoria Obligatoria):
1.) Necesidad de sacerdotes santos. Dignidad incomparable. Amor al sacerdocio;
2.) Necesidad del sacerdote. Oración y mortificación por los sacerdotes;
3.) El sacerdote, en nombre del Señor, acompaña la vida del hombre. Aprecio por quienes tanto nos han dado. Confiar mucho en la oración del sacerdote.
Hoy se celebra la festividad de S. Juan María Vianney, el cura de Ars, patrono de los sacerdotes.
Es de destacar el gran don de la predicación y de la confesión, pero al P. Guillermo lo que más le llama la atención de este santo es su humildad.
Cuando se está muy cerca de Dios, y cuanto más cerca se está de de su Luz, más se ve nuestra maldad, pero no para vivir tristes, sino para afianzarnos en la confianza en el Amor y la Misericordia de Dios.