Continuamos con el capítulo 4º del libro "El peregrino ruso" y comenzamos el relato titulado "Una familia Ortodoxa". El Peregrino conoce a esta familia y se maravilla por su santidad y ejemplaridad. Conoceremos la historia y costumbres de esta familia. Por último escucharemos una reflexión del Padre Nuestro a partir de los Padres del desierto.
ejemplo vivo
Cuentan que a un centro de acogida llego un hombre alcoholizado al que los expertos dieron por perdido, pero la ternura y atención de los voluntarios consiguieron cambiar su forma de ser, y paso a ser la persona más servicial, tanto que los que los mendigos, que llegaban al centro, querían parecerse a él.
"De tal palo, tal astilla" dice el refrán. El P. Alfonso nos relata un par de cuentos que resaltan la importancia de formar a los hijos en las virtudes, porque de lo que rebosa el corazón, habla la boca
Jóvenes voluntarios comparten sus experiencias de apostolado en una parroquia de barrio sensible. ¿Qué han vivido? ¿Qué experiencias humanas y espirituales han vivido? La juventud cristiana no es el futuro de la Iglesia Católica, es su presente.
En esta ocasión, el P. Alfonso nos cuenta la historia de un monje al que el abad del monasterio quiso preparar para que fuese por toda la monarca a predicar. Lo mando a aprender de los más sabios, a trabajar el campo con los campesinos, a cuidar y a aconsejar desvalidos que acudiesen al monasterio en busca de consejo. Por último lo envió con unos titiriteros a que aprendiese a ver el mundo, pero solo cuando después de una epidemia de peste en la comarca el joven monje regreso al monasterio enfermo y agotado después de cuidar a enfermos y moribundos fue cuando el abad considero que ya estaba listo, porque ya se había convertido en el evangelio vivo capaz de reflejar con su vida la de Jesucristo
Continuamos con el capítulo 4º del libro "El peregrino ruso" y comenzamos el relato titulado "Una familia Ortodoxa". El Peregrino conoce a esta familia y se maravilla por su santidad y ejemplaridad. Conoceremos la historia y costumbres de esta familia. Por último escucharemos una reflexión del Padre Nuestro a partir de los Padres del desierto.
Cuentan que a un centro de acogida llego un hombre alcoholizado al que los expertos dieron por perdido, pero la ternura y atención de los voluntarios consiguieron cambiar su forma de ser, y paso a ser la persona más servicial, tanto que los que los mendigos, que llegaban al centro, querían parecerse a él.
"De tal palo, tal astilla" dice el refrán. El P. Alfonso nos relata un par de cuentos que resaltan la importancia de formar a los hijos en las virtudes, porque de lo que rebosa el corazón, habla la boca
Jóvenes voluntarios comparten sus experiencias de apostolado en una parroquia de barrio sensible. ¿Qué han vivido? ¿Qué experiencias humanas y espirituales han vivido? La juventud cristiana no es el futuro de la Iglesia Católica, es su presente.
En esta ocasión, el P. Alfonso nos cuenta la historia de un monje al que el abad del monasterio quiso preparar para que fuese por toda la monarca a predicar. Lo mando a aprender de los más sabios, a trabajar el campo con los campesinos, a cuidar y a aconsejar desvalidos que acudiesen al monasterio en busca de consejo. Por último lo envió con unos titiriteros a que aprendiese a ver el mundo, pero solo cuando después de una epidemia de peste en la comarca el joven monje regreso al monasterio enfermo y agotado después de cuidar a enfermos y moribundos fue cuando el abad considero que ya estaba listo, porque ya se había convertido en el evangelio vivo capaz de reflejar con su vida la de Jesucristo
