Hoy concluiremos el comentario a la carta de fecha 26 y 27 de septiembre de 1937 y dirigida a su tío Leopoldo. Destacamos lo que dice Rafael sobre sus sueños, que nada tienen que ver con lo soñamos la mayoría, él en lo que sueña es en olvidar la vida terrena para soñar con la vida eterna, donde no habrá ni llanto, ni dolor y podremos contemplar directamente a Dios. Otra cosa que nos dice el Hno. Rafael en esta carta, es que le gusta hacer oración en la noche para seguir buscando a Dios. Le gusta sacrificarse con este tiempo de vela haciendo oración. Aprendamos del Hno. Rafael y hagamos sacrificios unidos a Cristo en la cruz.
Continuamos, en la segunda parte del programa, con la lectura de la carta de fecha 11 de octubre de 1937, también dirigida a su tío Leopoldo. Vuelve Rafael a hablar de La Virgen, y lo que más llama la atención, en esta carta, es la pena que le da el que tanta gente no ame con locura a La Señora, porque sólo María, después de Dios puede consolarnos en nuestras penas.
María, intercesora
Hoy comenzamos la carta escrita el 22 de noviembre de 1935, y dirigida a su tía, la duquesa de Maqueda. Esta carta es respuesta a la escrita por su tía, en ella expresa que el día que sepamos amar a Dios, dejaremos de decirle “Hasta cuando, Señor”, porque entonces sabremos lo que es el amor de verdad y cuanta es nuestra miseria. Dice el Hno. Rafael: “Mi alma es un volcán a punto estallar. Que ganas tengo de encerrarme en el monasterio para lanzar a Dios todo lo que siento”… “Cuando pienso en Dios, me atonto”.
En la segunda parte del programa seguimos leyendo la carta de la primera parte. En esta carta le dice a su tía que no sabe como ha sido posible que Dios lo haya elegido para guiar a su tía, y le pide oraciones por él porque en este instante las necesito. Me pongo en manos de María, porque es la única que me entiende.
Continuamos con las meditaciones del Hno. Rafael, en esta ocasión con la correspondiente al 6 de agosto de 1936 titulada “las peras del soto”. En ella nos relata como recoge las espigas, que han quedado después de la siega, según le manda el superior. Que importante es el trabajo dentro y fuera de la Trapa para realizarnos como personas, y que importante ofrecer la obediencia en clave de amor.
La siguiente meditación que nos encontramos tiene fecha 8 de agosto, y tiene por título, “Sólo Tú”. En esta meditación nos habla de como los hombres perdemos el tiempo interesados sólo en las cosas del mundo, cuando sólo Dios debería ocupar nuestro pensamiento. Debemos ver al Creador en todo lo que nos rodea, sea bonito o feo, porque todo es obra suya.
En estas fechas, estamos casi en Navidad, deberíamos pensar que Dios debería ser lo único realmente importante de nuestra vida. El se va a hacer hombre y nosotros pensando en un montón de cosas que nos hace olvidar el motivo por el que hemos nacido.
Terminamos con la oración habitual del Hno. Rafael, en esta ocasión con la titulada “Poner a la Virgen como intercesora”
Hoy concluiremos el comentario a la carta de fecha 26 y 27 de septiembre de 1937 y dirigida a su tío Leopoldo. Destacamos lo que dice Rafael sobre sus sueños, que nada tienen que ver con lo soñamos la mayoría, él en lo que sueña es en olvidar la vida terrena para soñar con la vida eterna, donde no habrá ni llanto, ni dolor y podremos contemplar directamente a Dios. Otra cosa que nos dice el Hno. Rafael en esta carta, es que le gusta hacer oración en la noche para seguir buscando a Dios. Le gusta sacrificarse con este tiempo de vela haciendo oración. Aprendamos del Hno. Rafael y hagamos sacrificios unidos a Cristo en la cruz.
Continuamos, en la segunda parte del programa, con la lectura de la carta de fecha 11 de octubre de 1937, también dirigida a su tío Leopoldo. Vuelve Rafael a hablar de La Virgen, y lo que más llama la atención, en esta carta, es la pena que le da el que tanta gente no ame con locura a La Señora, porque sólo María, después de Dios puede consolarnos en nuestras penas.
Hoy comenzamos la carta escrita el 22 de noviembre de 1935, y dirigida a su tía, la duquesa de Maqueda. Esta carta es respuesta a la escrita por su tía, en ella expresa que el día que sepamos amar a Dios, dejaremos de decirle “Hasta cuando, Señor”, porque entonces sabremos lo que es el amor de verdad y cuanta es nuestra miseria. Dice el Hno. Rafael: “Mi alma es un volcán a punto estallar. Que ganas tengo de encerrarme en el monasterio para lanzar a Dios todo lo que siento”… “Cuando pienso en Dios, me atonto”.
En la segunda parte del programa seguimos leyendo la carta de la primera parte. En esta carta le dice a su tía que no sabe como ha sido posible que Dios lo haya elegido para guiar a su tía, y le pide oraciones por él porque en este instante las necesito. Me pongo en manos de María, porque es la única que me entiende.
Continuamos con las meditaciones del Hno. Rafael, en esta ocasión con la correspondiente al 6 de agosto de 1936 titulada “las peras del soto”. En ella nos relata como recoge las espigas, que han quedado después de la siega, según le manda el superior. Que importante es el trabajo dentro y fuera de la Trapa para realizarnos como personas, y que importante ofrecer la obediencia en clave de amor.
La siguiente meditación que nos encontramos tiene fecha 8 de agosto, y tiene por título, “Sólo Tú”. En esta meditación nos habla de como los hombres perdemos el tiempo interesados sólo en las cosas del mundo, cuando sólo Dios debería ocupar nuestro pensamiento. Debemos ver al Creador en todo lo que nos rodea, sea bonito o feo, porque todo es obra suya.
En estas fechas, estamos casi en Navidad, deberíamos pensar que Dios debería ser lo único realmente importante de nuestra vida. El se va a hacer hombre y nosotros pensando en un montón de cosas que nos hace olvidar el motivo por el que hemos nacido.
Terminamos con la oración habitual del Hno. Rafael, en esta ocasión con la titulada “Poner a la Virgen como intercesora”