Mis miserias

El padre Pío, en el umbral del paraíso 23/07/23

En el programa de hoy, el Padre Pío nos enseña a valorar y a no echar en saco roto el sacramento de la Misericordia de Dios: la Confesión. Gema Beltrán, en su testimonio, nos hablará de cómo el Sacramento del Perdón le ha cambiado la vida. ¡Qué gran bondad la del Espíritu Paráclito para todos, pero cuánto mayor para ti que lo buscas! (Padre Pío)

Solo Dios: el hermano Rafael 02/08/21

Hoy comenzamos con el comentario a la carta 8 de mayo de 1937 y dirigida a su tía María que leíamos en el programa pasado. Lo principal de esta carta es el motivo por el que la escribe que es dar gloria a Dios, y consuelo, ánimo y serenidad, a su tía, en este periodo de guerra en España. Otra cosa a destacar de esta carta es como Rafael quiere ocultar su principal tesoro, la cruz y el sufrimiento que le toca vivir. Rafael es feliz a pesar de la cruz, porque Rafael no desea nada para él, no pide nada, él espera lo que Dios le dé. Otra cosa que Rafael nos dice en esta carta es que si de verdad amasemos a Dios nuestro propio yo nos estorbaría, porque las miserias que todos tenemos nos impedirían ver el amor que Dios nos tiene. Debemos saber negarnos a nosotros mismos para seguir el camino de Cristo con la cruz a cuestas, no solo renunciar al mundo y sus cosas, sino a nosotros mismos. Si no hacemos esto toda nuestra labor apostólica será nada. Terminamos el programa con la oración de Rafael titulada “¡Qué feliz soy en medio de mis penas!”

El padre Pío, en el umbral del paraíso 23/07/23

En el programa de hoy, el Padre Pío nos enseña a valorar y a no echar en saco roto el sacramento de la Misericordia de Dios: la Confesión. Gema Beltrán, en su testimonio, nos hablará de cómo el Sacramento del Perdón le ha cambiado la vida. ¡Qué gran bondad la del Espíritu Paráclito para todos, pero cuánto mayor para ti que lo buscas! (Padre Pío)

Solo Dios: el hermano Rafael 02/08/21

Hoy comenzamos con el comentario a la carta 8 de mayo de 1937 y dirigida a su tía María que leíamos en el programa pasado. Lo principal de esta carta es el motivo por el que la escribe que es dar gloria a Dios, y consuelo, ánimo y serenidad, a su tía, en este periodo de guerra en España. Otra cosa a destacar de esta carta es como Rafael quiere ocultar su principal tesoro, la cruz y el sufrimiento que le toca vivir. Rafael es feliz a pesar de la cruz, porque Rafael no desea nada para él, no pide nada, él espera lo que Dios le dé. Otra cosa que Rafael nos dice en esta carta es que si de verdad amasemos a Dios nuestro propio yo nos estorbaría, porque las miserias que todos tenemos nos impedirían ver el amor que Dios nos tiene. Debemos saber negarnos a nosotros mismos para seguir el camino de Cristo con la cruz a cuestas, no solo renunciar al mundo y sus cosas, sino a nosotros mismos. Si no hacemos esto toda nuestra labor apostólica será nada. Terminamos el programa con la oración de Rafael titulada “¡Qué feliz soy en medio de mis penas!”