Ocozías

La tierra prometida 22/03/23

MUERTE DE JEHÚ, REY DE ISRAEL: Después de acabar con las vidas Joram, Ocozías y Jezabel, Jehú borra toda huella de la familia de Joram, designada como Ajab, toda huella de la familia de Ocozías y, finalmente, toda huella de los profetas y seguidores de Baal apoyados por Jezabel. Pero Jehú, una vez que extirpó de Israel a Baal, siguió adorando a los becerros de oro que había en Betel y en Dan. De ahí que el reinado de Jehú se valore negativamente y que los reveses que Jehú sufre frente a los enemigos exteriores sean presentados como castigo de Dios a Israel.

La tierra prometida 22/02/23

MUERTE DE BEN-HADAD, REY DE SIRIA Y REINADO DE JAZAEL: Eliseo anuncia siete años de hambre en Israel y le dice a la mujer sunamita, cuyo hijo había resucitado, que emigre al país de los filisteos con su familia y no regrese hasta que acabe la hambruna. Por otra parte, el rey de Siria envía a Jazael, uno de su familia, a preguntar a Eliseo si sanará de su enfermedad. Eliseo le dice a Jazael que sí sanará de esa enfermedad pero que morirá y, al día siguiente, Jazael le asesina reinando en su lugar. El autor sagrado interrumpe la historia de Eliseo y retorna a la de los reyes de Judá que había dejado en I Reyes 22,41-51. Primero sube al trono del rey Joram y más tarde Ocozías. Ambos reyes fueron los causantes de que Judá volviera a practicar de nuevo la idolatría y el sincretismo religioso, pero, a pesar de todo, siguen siendo el eslabón que lleva adelante la sucesión davídica.

La tierra prometida 16/11/22

ELÍAS Y EL REY OCOZÍAS: En este programa comenzamos con el segundo libro de los Reyes. El relato bíblico se fija de nuevo en el profeta Elías cuya actividad había quedado interrumpida en el capítulo 21 del primer libro de los Reyes. La figura de Elías va a ceder paso a la del profeta Eliseo, que veremos ya en el próximo programa y que será el protagonista de la primera parte del segundo libro de los Reyes. Elías proclama ahora un oráculo de condena contra el rey Ocozías por haber creído y consultado a dioses extraños en vez de la Palabra de Dios proclamada a través de sus profetas.

La tierra prometida 22/03/23

MUERTE DE JEHÚ, REY DE ISRAEL: Después de acabar con las vidas Joram, Ocozías y Jezabel, Jehú borra toda huella de la familia de Joram, designada como Ajab, toda huella de la familia de Ocozías y, finalmente, toda huella de los profetas y seguidores de Baal apoyados por Jezabel. Pero Jehú, una vez que extirpó de Israel a Baal, siguió adorando a los becerros de oro que había en Betel y en Dan. De ahí que el reinado de Jehú se valore negativamente y que los reveses que Jehú sufre frente a los enemigos exteriores sean presentados como castigo de Dios a Israel.

La tierra prometida 22/02/23

MUERTE DE BEN-HADAD, REY DE SIRIA Y REINADO DE JAZAEL: Eliseo anuncia siete años de hambre en Israel y le dice a la mujer sunamita, cuyo hijo había resucitado, que emigre al país de los filisteos con su familia y no regrese hasta que acabe la hambruna. Por otra parte, el rey de Siria envía a Jazael, uno de su familia, a preguntar a Eliseo si sanará de su enfermedad. Eliseo le dice a Jazael que sí sanará de esa enfermedad pero que morirá y, al día siguiente, Jazael le asesina reinando en su lugar. El autor sagrado interrumpe la historia de Eliseo y retorna a la de los reyes de Judá que había dejado en I Reyes 22,41-51. Primero sube al trono del rey Joram y más tarde Ocozías. Ambos reyes fueron los causantes de que Judá volviera a practicar de nuevo la idolatría y el sincretismo religioso, pero, a pesar de todo, siguen siendo el eslabón que lleva adelante la sucesión davídica.

La tierra prometida 16/11/22

ELÍAS Y EL REY OCOZÍAS: En este programa comenzamos con el segundo libro de los Reyes. El relato bíblico se fija de nuevo en el profeta Elías cuya actividad había quedado interrumpida en el capítulo 21 del primer libro de los Reyes. La figura de Elías va a ceder paso a la del profeta Eliseo, que veremos ya en el próximo programa y que será el protagonista de la primera parte del segundo libro de los Reyes. Elías proclama ahora un oráculo de condena contra el rey Ocozías por haber creído y consultado a dioses extraños en vez de la Palabra de Dios proclamada a través de sus profetas.