Estamos en cuaresma, el tiempo litúrgico que nos prepara para la celebración de la Pascua, para entarar en nosotros mismos, escuchar la palabra de Dios y vencer las tentaciones del maligno, y todo con estas herramientas, la Palabra, la Oración y la Penitencia.
Penitencia
La Cuaresma es para convertirse. Seguro que este tiempo litúrgico hacemos penitencia, pero esta no nos debe hacer olvidar que cuaresma es tiempo de conversión
¿Qué sería para nosotros la Cuaresma, si no fuéramos lo que somos? En la Cuaresma, Cristo nos invita a cambiar de vida. La Iglesia nos invita a vivir la Cuaresma como un camino hacia Jesucristo, escuchando la Palabra de Dios, orando, compartiendo con el prójimo y haciendo obras buenas.
Jesús me quiere y me perdona. Jesús está deseando perdonar todos nuestros pecados y nos espera en el sacramento de la penitencia. La parábola del hijo pródigo nos explica muy bien cómo es ese perdón de Dios que acaba en una gran fiesta. Finalizamos con la sección de buenas noticias , donde os contaremos que ha nacido Isabel.
1494-1495: Resumen de lo tratado (6): El n.1494 recuerda la obligación del penitente de cumplir determinados actos de “satisfacción” o “penitencia” para reparar el daño causado por el pecado. Por su parte, el n. 1495 (que completamos con los nn. 236-238 del Youcat) enseña que solo pueden perdonar los pecados los sacerdotes que han recibido de la Iglesia la facultad de absolverlos.- Vida de S. Juan de la Cruz (70).
"Compendio del Catecismo" (P. Ortega y P. Visier) del 10/04/13: puntos 307-309.
307. ¿Quién es el ministro del sacramento de la Reconciliación?
Cristo confió el ministerio de la reconciliación a sus Apóstoles, a los obispos, sucesores de los Apóstoles, y a los presbíteros, colaboradores de los obispos, los cuales se convierten, por tanto, en instrumentos de la misericordia y de la justicia de Dios. Ellos ejercen el poder de perdonar los pecados en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo.
308. ¿A quién está reservada la absolución de algunos pecados particularmente graves?
La absolución de algunos pecados particularmente graves (como son los castigados con la excomunión) está reservada a la Sede Apostólica o al obispo del lugar o a los presbíteros autorizados por ellos, aunque todo sacerdote puede absolver de cualquier pecado y excomunión, al que se halla en peligro de muerte.
309. El confesor, ¿está obligado al secreto?
Dada la delicadeza y la grandeza de este ministerio y el respeto debido a las personas, todo confesor está obligado, sin ninguna excepción y bajo penas muy severas, a mantener el sigilo sacramental, esto es, el absoluto secreto sobre los pecados conocidos en confesión.
Seguimos con el "Compendio del Catecismo", una reposición de uno de los programas de los padres Mario Ortega y Roberto Visier. Vemos los puntos del 299 al 301 del compendio, sobre el sacramento de la penitencia.
Sacramento de la Penitencia (programa El compendio del Catecismo por los padres Mario Ortega y Roberto Visier.
1460 (cont.): Fines de la penitencia sacramental y criterios para su imposición: Seguimos profundizando en el n. 1460, hablando de las finalidades medicinal y expiatoria de la satisfacción y de los criterios para imponer la penitencia más adecuada.- Vida de S. Juan de la Cruz (32).
1460 (cont.): Caminos para la satisfacción de los pecados y la penitencia sacramental: Proseguimos el comentario del n. 1460 (con el marginal 2447), leyendo algunos textos neotestamentarios sobre la expiación que Cristo ha ofrecido por nuestros pecados, a la que nos invita a unir nuestros actos de reparación; entre ellos, tiene un valor especial la penitencia que el confesor impone en el sacramento, que puede adquirir diversas modalidades (oración, obras de misericordia, privaciones, aceptación de la cruz de cada día...).- Vida de S. Juan de la Cruz (32).
1460 (conclusión): “Cumplir la penitencia”: Concluimos el comentario del n. 1460 con la ayuda del P. Royo Marín, OP, que entraba en los aspectos más concretos y prácticos sobre la imposición y cumplimiento de las penitencias sacramentales.- Vida de S. Juan de la Cruz (33).
Estamos ofreciendo la reposición de tres programas de “Se buscan rebeldes” que el P. Ignacio Amorós ha dedicado al Sacramento de la Confesión. Hoy les ofrecemos el 3º de ellos, en el que emitió las reflexiones de otro sacerdote, el P. Pablo López, sobre dicho sacramento..
Estamos en cuaresma, el tiempo litúrgico que nos prepara para la celebración de la Pascua, para entarar en nosotros mismos, escuchar la palabra de Dios y vencer las tentaciones del maligno, y todo con estas herramientas, la Palabra, la Oración y la Penitencia.
La Cuaresma es para convertirse. Seguro que este tiempo litúrgico hacemos penitencia, pero esta no nos debe hacer olvidar que cuaresma es tiempo de conversión
¿Qué sería para nosotros la Cuaresma, si no fuéramos lo que somos? En la Cuaresma, Cristo nos invita a cambiar de vida. La Iglesia nos invita a vivir la Cuaresma como un camino hacia Jesucristo, escuchando la Palabra de Dios, orando, compartiendo con el prójimo y haciendo obras buenas.
Jesús me quiere y me perdona. Jesús está deseando perdonar todos nuestros pecados y nos espera en el sacramento de la penitencia. La parábola del hijo pródigo nos explica muy bien cómo es ese perdón de Dios que acaba en una gran fiesta. Finalizamos con la sección de buenas noticias , donde os contaremos que ha nacido Isabel.
1494-1495: Resumen de lo tratado (6): El n.1494 recuerda la obligación del penitente de cumplir determinados actos de “satisfacción” o “penitencia” para reparar el daño causado por el pecado. Por su parte, el n. 1495 (que completamos con los nn. 236-238 del Youcat) enseña que solo pueden perdonar los pecados los sacerdotes que han recibido de la Iglesia la facultad de absolverlos.- Vida de S. Juan de la Cruz (70).
"Compendio del Catecismo" (P. Ortega y P. Visier) del 10/04/13: puntos 307-309.
307. ¿Quién es el ministro del sacramento de la Reconciliación?
Cristo confió el ministerio de la reconciliación a sus Apóstoles, a los obispos, sucesores de los Apóstoles, y a los presbíteros, colaboradores de los obispos, los cuales se convierten, por tanto, en instrumentos de la misericordia y de la justicia de Dios. Ellos ejercen el poder de perdonar los pecados en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo.
308. ¿A quién está reservada la absolución de algunos pecados particularmente graves?
La absolución de algunos pecados particularmente graves (como son los castigados con la excomunión) está reservada a la Sede Apostólica o al obispo del lugar o a los presbíteros autorizados por ellos, aunque todo sacerdote puede absolver de cualquier pecado y excomunión, al que se halla en peligro de muerte.
309. El confesor, ¿está obligado al secreto?
Dada la delicadeza y la grandeza de este ministerio y el respeto debido a las personas, todo confesor está obligado, sin ninguna excepción y bajo penas muy severas, a mantener el sigilo sacramental, esto es, el absoluto secreto sobre los pecados conocidos en confesión.
Seguimos con el "Compendio del Catecismo", una reposición de uno de los programas de los padres Mario Ortega y Roberto Visier. Vemos los puntos del 299 al 301 del compendio, sobre el sacramento de la penitencia.
Sacramento de la Penitencia (programa El compendio del Catecismo por los padres Mario Ortega y Roberto Visier.
1460 (cont.): Fines de la penitencia sacramental y criterios para su imposición: Seguimos profundizando en el n. 1460, hablando de las finalidades medicinal y expiatoria de la satisfacción y de los criterios para imponer la penitencia más adecuada.- Vida de S. Juan de la Cruz (32).
1460 (cont.): Caminos para la satisfacción de los pecados y la penitencia sacramental: Proseguimos el comentario del n. 1460 (con el marginal 2447), leyendo algunos textos neotestamentarios sobre la expiación que Cristo ha ofrecido por nuestros pecados, a la que nos invita a unir nuestros actos de reparación; entre ellos, tiene un valor especial la penitencia que el confesor impone en el sacramento, que puede adquirir diversas modalidades (oración, obras de misericordia, privaciones, aceptación de la cruz de cada día...).- Vida de S. Juan de la Cruz (32).
1460 (conclusión): “Cumplir la penitencia”: Concluimos el comentario del n. 1460 con la ayuda del P. Royo Marín, OP, que entraba en los aspectos más concretos y prácticos sobre la imposición y cumplimiento de las penitencias sacramentales.- Vida de S. Juan de la Cruz (33).
Estamos ofreciendo la reposición de tres programas de “Se buscan rebeldes” que el P. Ignacio Amorós ha dedicado al Sacramento de la Confesión. Hoy les ofrecemos el 3º de ellos, en el que emitió las reflexiones de otro sacerdote, el P. Pablo López, sobre dicho sacramento..