En esta ocasión, hablamos de la Inmaculada Concepción de María, que celebramos el próximo viernes 8 de diciembre. Ella es primicia de nuestra redención y clave de esperanza para nuestras vidas.
Redención
Síntesis teológico-espiritual (2): Proseguimos nuestra reflexión final sobre la Eucaristía, recordando los puntos doctrinales básicos relativos a su carácter sacrificial, y las consecuencias espirituales de esta dimensión para nuestra vida.- Familia de Sta. Teresita (74).
"Nada que no sea abrazado puede ser redimido", El P. Valentín explica esta frase del papa Francisco, y nos dice hasta que punto Cristo nos ama para redimirnos.
Profundizaremos en el significado de la realeza de María.
En la 2ª parte del programa, comentamos como María es asociada a la redención de Cristo.
El P. Luis Fernando dirige esta oración, teniendo especialmente presente la JMJ que se está desarrollando en Lisboa con el Papa Francisco, y centra la meditación en la parábola del tesoro escondido. Cada uno de nosotros somos un tesoro para el Corazón de Dios, que se ha hecho hombre y pagado el precio de su Sangre para nuestra redención, y nos invita a descubrir en Él el auténtico Tesoro por el que vale la pena entregar la vida.
El P. Luis Fernando dirige esta Hora Santa, en la que medita sobre el sacrificio de Abraham, en el que Isaac era figura del verdadero Cordero que quita el pecado del mundo, y Abraham, signo del Padre que "tanto amó al mundo que le entregó a su único Hijo".
Hay que ver cuantos masters se ofertan ahora mismo para la formación, sabe Dios en que, pero el hombre no se puede redimir a si mismo. Solo Dios nos puede salvar y reconstruir nuestra fragil esperanza, porque la redención del hombre por el hombre es imposible
La Redención de la Cruz y la colaboración en ella, con y como María
Ofrecimiento de la vida (1): Hablamos del valor de la oración y el ofrecimiento de la vida ordinaria como forma de colaborar con Cristo a la Redención del mundo.
La fuerza de la debilidad. Como dice el Papa Francisco: “Dios no confía solo en nuestros talentos, sino también en nuestra debilidad redimida”. ¡Os lo explicamos!
La reparación, en concreto del dolor de Dios ante el pecado
Mirar, acoger y colaborar con el Amor Redentor de Cristo como María
En esta ocasión, hablamos de la Inmaculada Concepción de María, que celebramos el próximo viernes 8 de diciembre. Ella es primicia de nuestra redención y clave de esperanza para nuestras vidas.
Síntesis teológico-espiritual (2): Proseguimos nuestra reflexión final sobre la Eucaristía, recordando los puntos doctrinales básicos relativos a su carácter sacrificial, y las consecuencias espirituales de esta dimensión para nuestra vida.- Familia de Sta. Teresita (74).
"Nada que no sea abrazado puede ser redimido", El P. Valentín explica esta frase del papa Francisco, y nos dice hasta que punto Cristo nos ama para redimirnos.
Profundizaremos en el significado de la realeza de María.
En la 2ª parte del programa, comentamos como María es asociada a la redención de Cristo.
El P. Luis Fernando dirige esta oración, teniendo especialmente presente la JMJ que se está desarrollando en Lisboa con el Papa Francisco, y centra la meditación en la parábola del tesoro escondido. Cada uno de nosotros somos un tesoro para el Corazón de Dios, que se ha hecho hombre y pagado el precio de su Sangre para nuestra redención, y nos invita a descubrir en Él el auténtico Tesoro por el que vale la pena entregar la vida.
El P. Luis Fernando dirige esta Hora Santa, en la que medita sobre el sacrificio de Abraham, en el que Isaac era figura del verdadero Cordero que quita el pecado del mundo, y Abraham, signo del Padre que "tanto amó al mundo que le entregó a su único Hijo".
Hay que ver cuantos masters se ofertan ahora mismo para la formación, sabe Dios en que, pero el hombre no se puede redimir a si mismo. Solo Dios nos puede salvar y reconstruir nuestra fragil esperanza, porque la redención del hombre por el hombre es imposible
La Redención de la Cruz y la colaboración en ella, con y como María
Ofrecimiento de la vida (1): Hablamos del valor de la oración y el ofrecimiento de la vida ordinaria como forma de colaborar con Cristo a la Redención del mundo.
La fuerza de la debilidad. Como dice el Papa Francisco: “Dios no confía solo en nuestros talentos, sino también en nuestra debilidad redimida”. ¡Os lo explicamos!
La reparación, en concreto del dolor de Dios ante el pecado
Mirar, acoger y colaborar con el Amor Redentor de Cristo como María
