1257 (cont.): El Bautismo es necesario para la salvación: Seguimos comentando el n. 1257, que fundamenta con textos bíblicos y del Magisterio eclesial la necesidad del Bautismo en la única mediación salvífica de Cristo y su prolongación en la Iglesia. Por ello, el sacramento es necesario para la salvación en aquellos a los que el Evangelio ha sido anunciado, matizando que Dios no queda sometido a sus sacramentos.- Vida de S. Ignacio de Loyola (47).
Salvación
230. ¿Por qué los sacramentos son necesarios para la salvación?
1258-1260: El Bautismo de deseo: El n. 1258 (con el marginal 2473) y el n. 1259 (con el marginal 1249) nos hablan del Bautismo de sangre y Bautismo de deseo de los mártires y catecúmenos, que producen los frutos del Bautismo aun sin ser sacramento. Y comenzamos el comentario del n. 1260, que plantea el tema de fondo de cómo se conjuga la voluntad salvífica universal de Dios con la necesidad del Bautismo para la salvación.- Vida de S. Ignacio de Loyola (49).
1256-1257: El ministro y la necesidad del Bautismo: Comentamos el n. 1256, que enseña que el ministro ordinario del Bautismo es el obispo, presbítero o diácono, pero que en caso de necesidad puede bautizar cualquier persona, incluso no cristiana, siempre que haga lo que hace la Iglesia y con la intención de esta. Y comenzamos el comentario del n. 1257, que nos habla de la necesidad del Bautismo.- Vida de S. Ignacio de Loyola (46).
1257 (cont.): Jesucristo, único Salvador: Seguimos profundizando en el n. 1257, con ayuda de un texto del Decreto sobre las misiones del Vaticano II y de los marginales 161, 846 y 1129. Vemos cómo Cristo, el único Salvador, nos comunica su gracia a través de la Iglesia y el Bautismo.- Vida de S. Ignacio de Loyola (48).
Fátima, un Corazón vivo. Fátima contiene un mensaje extraordinario de salvación para toda la humanidad. Viene del Cielo para nosotros; se dirige a un mundo que se destruye. Fátima es una profecía abierta: una palabra que se ha cumplido y que se cumplirá, porque aún no ha terminado. Con nuestra invitada: Esperanza Medina, miembro del Apostolado Mundial de Fátima
Hoy celebramos la muerte de Dios, ¡Qué tremenda afirmación! Cuantas veces nos dicen lo que los griegos a S. Pablo, eso es una locura, creer en un Dios que se deja ofender y matar de aquella manera, pero para nosotros, los cristianos, Su muerte es la salvación
1187: Resumen (1). La iniciativa de Dios en la vida cristiana: Comenzamos el resumen de lo visto en este capítulo sobre la celebración de la Liturgia recordando su lugar dentro de las 4 partes del Catecismo, en todas las cuales se resalta la iniciativa divina en la obra salvífica. En ese sentido, el n. 1187 nos recuerda que nuestro Sumo Sacerdote, Jesucristo, es el verdadero celebrante de la Liturgia celestial, a la que asocia a los miembros de su Cuerpo Místico.- Vida de S. Ignacio de Loyola (1)
La historia de hoy es un relato de Paul Claudel, de su obra "La Anunciación de María", en que quiere resaltar el amor entre dos jóvenes, y como ella adquiere la enfermedad de su amado, y este se cura de la misma. Ejemplo del amor de Dios que toma nuestras "enfermedades" sobre si para que quedemos libres de ellas.
Hoy, el P. Julián nos habla de la Navidad a traves de un hermoso poema de Antonio Murciano, pero no solo del nacimiento del Niño, sino, también, de la Salvación de estsa humanidad descarriada y perdida.
Jesús vino, vendrá y viene en cualquier momento de nuestras vidas. El P. Luis Fernando dirige esta Hora Santa, centrada en la necesidad que todos tenemos del Salvador, en la esperanza de recibir su gracia, y en cómo prepararnos a su venida. ¡Para vivir mejor el Adviento!
El rey del Universo carga sobre sí con nuestros sufrimientos y pecados, y da su vida en la cruz por todos
1257 (cont.): El Bautismo es necesario para la salvación: Seguimos comentando el n. 1257, que fundamenta con textos bíblicos y del Magisterio eclesial la necesidad del Bautismo en la única mediación salvífica de Cristo y su prolongación en la Iglesia. Por ello, el sacramento es necesario para la salvación en aquellos a los que el Evangelio ha sido anunciado, matizando que Dios no queda sometido a sus sacramentos.- Vida de S. Ignacio de Loyola (47).
230. ¿Por qué los sacramentos son necesarios para la salvación?
1258-1260: El Bautismo de deseo: El n. 1258 (con el marginal 2473) y el n. 1259 (con el marginal 1249) nos hablan del Bautismo de sangre y Bautismo de deseo de los mártires y catecúmenos, que producen los frutos del Bautismo aun sin ser sacramento. Y comenzamos el comentario del n. 1260, que plantea el tema de fondo de cómo se conjuga la voluntad salvífica universal de Dios con la necesidad del Bautismo para la salvación.- Vida de S. Ignacio de Loyola (49).
1256-1257: El ministro y la necesidad del Bautismo: Comentamos el n. 1256, que enseña que el ministro ordinario del Bautismo es el obispo, presbítero o diácono, pero que en caso de necesidad puede bautizar cualquier persona, incluso no cristiana, siempre que haga lo que hace la Iglesia y con la intención de esta. Y comenzamos el comentario del n. 1257, que nos habla de la necesidad del Bautismo.- Vida de S. Ignacio de Loyola (46).
1257 (cont.): Jesucristo, único Salvador: Seguimos profundizando en el n. 1257, con ayuda de un texto del Decreto sobre las misiones del Vaticano II y de los marginales 161, 846 y 1129. Vemos cómo Cristo, el único Salvador, nos comunica su gracia a través de la Iglesia y el Bautismo.- Vida de S. Ignacio de Loyola (48).
Fátima, un Corazón vivo. Fátima contiene un mensaje extraordinario de salvación para toda la humanidad. Viene del Cielo para nosotros; se dirige a un mundo que se destruye. Fátima es una profecía abierta: una palabra que se ha cumplido y que se cumplirá, porque aún no ha terminado. Con nuestra invitada: Esperanza Medina, miembro del Apostolado Mundial de Fátima
Hoy celebramos la muerte de Dios, ¡Qué tremenda afirmación! Cuantas veces nos dicen lo que los griegos a S. Pablo, eso es una locura, creer en un Dios que se deja ofender y matar de aquella manera, pero para nosotros, los cristianos, Su muerte es la salvación
1187: Resumen (1). La iniciativa de Dios en la vida cristiana: Comenzamos el resumen de lo visto en este capítulo sobre la celebración de la Liturgia recordando su lugar dentro de las 4 partes del Catecismo, en todas las cuales se resalta la iniciativa divina en la obra salvífica. En ese sentido, el n. 1187 nos recuerda que nuestro Sumo Sacerdote, Jesucristo, es el verdadero celebrante de la Liturgia celestial, a la que asocia a los miembros de su Cuerpo Místico.- Vida de S. Ignacio de Loyola (1)
La historia de hoy es un relato de Paul Claudel, de su obra "La Anunciación de María", en que quiere resaltar el amor entre dos jóvenes, y como ella adquiere la enfermedad de su amado, y este se cura de la misma. Ejemplo del amor de Dios que toma nuestras "enfermedades" sobre si para que quedemos libres de ellas.
Hoy, el P. Julián nos habla de la Navidad a traves de un hermoso poema de Antonio Murciano, pero no solo del nacimiento del Niño, sino, también, de la Salvación de estsa humanidad descarriada y perdida.
Jesús vino, vendrá y viene en cualquier momento de nuestras vidas. El P. Luis Fernando dirige esta Hora Santa, centrada en la necesidad que todos tenemos del Salvador, en la esperanza de recibir su gracia, y en cómo prepararnos a su venida. ¡Para vivir mejor el Adviento!
El rey del Universo carga sobre sí con nuestros sufrimientos y pecados, y da su vida en la cruz por todos