P. Julián Lozano. Hoy es la festividad de la Virgen del Rocio y la memoria de Sta. María, Madre de la Iglesia, festividad que instituyo el papa Francisco para el lunes que sigue a Pentecostes. La Iglesia nos dice que el camino para seguir en el tiempo ordinario es hacerlo de la mano de la Virgen, nuestra Madre.
Hace días celebrabamos los quinientos años del comienzo de la conversión de San Ignacio de Loyola, a causa de las heridas provocadas por una bala de cañon. ¿Es posible que el Espíritu Santo llegue a traves de una herida de guerra? Parece que a San Ignacio así le pasó, y parece que así nos puede pasar a nosotros.
Pidamos a la Virgen que nos acompañe e interceda para el Señor entre en nosotros precisamente por las heridas que nos hacen sufrir.