Este domingo nos recuerda que Dios nos ha regalado muchos dones, y que no nos vigila para ver como los empleamos sino que nos deja libres , confiando en nuestra madurez y responsabilidad. Los primero, demos gracias a Dios por los bienes sin mirar a los regalados a los demás. No tengamos miedo para no ser timoratos en cobardes, sino que seamos valientes y atrevidos confiados en la Providencia