Busqueda de Dios

Solo Dios: el hermano Rafael 27/06/22

Comenzamos con el comentario de la meditación del 12 de abril de 1938 y titulada "Martes santo" que ya leíamos la semana pasada. Lo primero de todo es destacar la seguridad del Hno. Rafael en que solo en Dios encuentra lo que busca, y lo encuentra en abundancia, y él sólo busca a Dios. El mundo vive muy egoísta, por lo que no encuentra más que intereses mezquinos, en vez de la felicidad que desea. Pero Rafael dice que quiere ser santo, pero no lo consigue porque no se deja hacer, porque se queda en las cosas del mundo. Debemos aprovechar las cosas de Dios y dejarnos hacer, porque Dios no va a parar hasta lograr nuestra santidad. En la segunda parte, el hno. Rafael pide un corazón grande para amar a los hermanos en los que sólo veía faltas. También pide que tengamos caridad por las almas débiles, y que debemos entender que el amor a Dios, el auténtico, pasa por el amor al prójimo, sobre todo por el prójimo más lejano en cuanto a sus pobrezas y miserias. Terminamos orando con el Hno. Rafael, con la oración de título “Me abismo en mi pequeñez”

Solo Dios: el hermano Rafael 27/09/21

Lo primero será terminar con la lectura de la carta de fecha 26 de septiembre de 1937 que ya comenzamos a leer la semana pasada. Dice el Hno. Rafael que reza cada día por todos, por los que sufren, por los que no creen, por los que se presentan ahora delante de Dios, y que se pasa todo el día pensando en la Eternidad. En la segunda parte haremos el comentario a la carta leída anteriormente. De entre todo, es importante resaltar las ansias de Rafael por estar en el monasterio para vivir más cerca de Dios, aunque solo sea un preludio de la vida eterna en Dios. También es importante resaltar el sufrimiento del hermano Rafael porque las almas están olvidando a Dios, e incluso algunos no le quieren y son ingratos. No entiende como se puede vivir así en esta vida y como Dios nos responde a ese desprecio, con paciencia y con amor continuamente. Busquemos a ese Dios en el silencio de la oración. Terminamos orando con la oración del hermano Rafael “amo todo lo que me envías”

Solo Dios: el hermano Rafael 03/05/21

Hoy terminaremos el comentario a la meditación de 4 de enero de 1937 titulada “Solo Dios y yo”. Pasan los días y el alma comprende que nada la puede llenar y está ansiosa por encontrarse en el Cielo, contemplando a Dios. Todo le cansa al Hno. Rafel, busca en los otros hombres la felicidad, quizás dentro de la comunidad de los hermanos trapenses, pero Sólo Dios la puede dar. Continuamos, en la segunda parte del programa con el cuaderno de “las meditaciones de un trapense”, ahora con la de fecha 6 de enero de 1937 y titulada “Adoración de los Reyes”. Han pasado veinte siglos, pero la gente sigue preguntando ‘¿habéis visto al que ansía mi alma?’ Ahora como entonces hay gentes que buscan a Dios, pero no se atreven a mirar a la estrella que es la fe. Recordaba mis días infantiles, los regalos, el turrón,... No me entristecen estos recuerdos porque espero un regalo muy superior a todos, el mismo Dios. Como último detalle para hoy vemos como los poderosos del mundo se inclinan y adoran a un niño, y le traen regalos. Humildad, que poco se practica en este tiempo, festejamos el nacimiento, pero no nos inclinamos ante Él.

Solo Dios: el hermano Rafael 27/06/22

Comenzamos con el comentario de la meditación del 12 de abril de 1938 y titulada "Martes santo" que ya leíamos la semana pasada. Lo primero de todo es destacar la seguridad del Hno. Rafael en que solo en Dios encuentra lo que busca, y lo encuentra en abundancia, y él sólo busca a Dios. El mundo vive muy egoísta, por lo que no encuentra más que intereses mezquinos, en vez de la felicidad que desea. Pero Rafael dice que quiere ser santo, pero no lo consigue porque no se deja hacer, porque se queda en las cosas del mundo. Debemos aprovechar las cosas de Dios y dejarnos hacer, porque Dios no va a parar hasta lograr nuestra santidad. En la segunda parte, el hno. Rafael pide un corazón grande para amar a los hermanos en los que sólo veía faltas. También pide que tengamos caridad por las almas débiles, y que debemos entender que el amor a Dios, el auténtico, pasa por el amor al prójimo, sobre todo por el prójimo más lejano en cuanto a sus pobrezas y miserias. Terminamos orando con el Hno. Rafael, con la oración de título “Me abismo en mi pequeñez”

Solo Dios: el hermano Rafael 27/09/21

Lo primero será terminar con la lectura de la carta de fecha 26 de septiembre de 1937 que ya comenzamos a leer la semana pasada. Dice el Hno. Rafael que reza cada día por todos, por los que sufren, por los que no creen, por los que se presentan ahora delante de Dios, y que se pasa todo el día pensando en la Eternidad. En la segunda parte haremos el comentario a la carta leída anteriormente. De entre todo, es importante resaltar las ansias de Rafael por estar en el monasterio para vivir más cerca de Dios, aunque solo sea un preludio de la vida eterna en Dios. También es importante resaltar el sufrimiento del hermano Rafael porque las almas están olvidando a Dios, e incluso algunos no le quieren y son ingratos. No entiende como se puede vivir así en esta vida y como Dios nos responde a ese desprecio, con paciencia y con amor continuamente. Busquemos a ese Dios en el silencio de la oración. Terminamos orando con la oración del hermano Rafael “amo todo lo que me envías”

Solo Dios: el hermano Rafael 03/05/21

Hoy terminaremos el comentario a la meditación de 4 de enero de 1937 titulada “Solo Dios y yo”. Pasan los días y el alma comprende que nada la puede llenar y está ansiosa por encontrarse en el Cielo, contemplando a Dios. Todo le cansa al Hno. Rafel, busca en los otros hombres la felicidad, quizás dentro de la comunidad de los hermanos trapenses, pero Sólo Dios la puede dar. Continuamos, en la segunda parte del programa con el cuaderno de “las meditaciones de un trapense”, ahora con la de fecha 6 de enero de 1937 y titulada “Adoración de los Reyes”. Han pasado veinte siglos, pero la gente sigue preguntando ‘¿habéis visto al que ansía mi alma?’ Ahora como entonces hay gentes que buscan a Dios, pero no se atreven a mirar a la estrella que es la fe. Recordaba mis días infantiles, los regalos, el turrón,... No me entristecen estos recuerdos porque espero un regalo muy superior a todos, el mismo Dios. Como último detalle para hoy vemos como los poderosos del mundo se inclinan y adoran a un niño, y le traen regalos. Humildad, que poco se practica en este tiempo, festejamos el nacimiento, pero no nos inclinamos ante Él.