Veremos al descubierto el alma de Pablo cuando esta próxima a su martirio y desahoga su corazón con Timoteo, el discípulo amado y que contiene joyas doctrinales como cuando dice que "Toda Escritura es inspirada por Dios y útil para enseñar, para argüir, para corregir y para educar en la justicia"
Cartas paulinas
Hoy vemos los dos últimos versículos de la 2ª Carta a Timoteo, considerada como el testamento de San Pablo. Comenzamos a estudiar las llamadas cartas apostólicas, empezando por la de los Hebreos, que sin ser de San Pablo, está llena de espíritu paulino.
Veremos los dos últimos versículos de la 2ª carta a Timoteo y comenzamos a desmenuzar una nueva carta, la que Pablo dirige a Tito primer obispo de Creta.
Carta a Timoteo
Carta a Timoteo
...
Vemos la carta a los tesalonicenses y más bien parece una afectuosa conversación con sus hijos. Pero veremos que, en este escrito, van una serie de consejos que la hacen ser una preciosa joya de valor inestimable para vivir en caridad en humildad y en gozo espiritual.
Pablo con el cuerpo místico de telón de fondo desde la perspectiva adulta habla del hombre perfecto con referencia al Cristo total cabeza y miembros, y exhorta a hablar con verdad y desechar cualquier clase de maldad, e invita a ser imitadores de Dios vivir en el amor, como Cristo nos amó.
Comentaremos el final de la Carta a los Colosenses, con los saludos y recomendaciones finales y que firma Pablo personalmente después de la labor del amanuense. Además, comenzaremos a ver la Carta a los Efesios, donde Pablo hizo una gran labor con muchas conversiones y que motivó una vez más la persecución de los cristianos que allí había.
Comienza Pablo admitiendo la existencia y actividad buena y mala de los espíritus celestes, pero advierte de que solo en Cristo habita la plenitud de la divinidad corporalmente, recalca que solo Cristo redime: "Canceló la nota de cargo que había contra nosotros, la de las prescripciones con sus cláusulas desfavorables, y la suprimió clavándola en la cruz".
Vemos el final de la carta a los romanos, que es como un epílogo que invita a acogernos mutuamente y una preciosa doxología final. Además, comenzamos la carta a los Colosenses, una epístola eminentemente cristológica, con frases como esta: "Pues Dios tuvo a bien hacer residir en él toda la Plenitud, y reconciliar por él y para él todas las cosas, pacificando, mediante la sangre de su cruz, lo que hay en la tierra y en los cielos".
Pablo anuncia la vuelta de su pueblo judío a la fe, su conversión y aplicaciones morales. El culto espiritual, humildad y caridad en la comunidad. Sumisión a los poderes civiles, amor y socorro a los enemigos, etc. Y no juzgar a nadie.
Veremos al descubierto el alma de Pablo cuando esta próxima a su martirio y desahoga su corazón con Timoteo, el discípulo amado y que contiene joyas doctrinales como cuando dice que "Toda Escritura es inspirada por Dios y útil para enseñar, para argüir, para corregir y para educar en la justicia"
Hoy vemos los dos últimos versículos de la 2ª Carta a Timoteo, considerada como el testamento de San Pablo. Comenzamos a estudiar las llamadas cartas apostólicas, empezando por la de los Hebreos, que sin ser de San Pablo, está llena de espíritu paulino.
Veremos los dos últimos versículos de la 2ª carta a Timoteo y comenzamos a desmenuzar una nueva carta, la que Pablo dirige a Tito primer obispo de Creta.
Carta a Timoteo
Carta a Timoteo
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Vemos la carta a los tesalonicenses y más bien parece una afectuosa conversación con sus hijos. Pero veremos que, en este escrito, van una serie de consejos que la hacen ser una preciosa joya de valor inestimable para vivir en caridad en humildad y en gozo espiritual.
Pablo con el cuerpo místico de telón de fondo desde la perspectiva adulta habla del hombre perfecto con referencia al Cristo total cabeza y miembros, y exhorta a hablar con verdad y desechar cualquier clase de maldad, e invita a ser imitadores de Dios vivir en el amor, como Cristo nos amó.
Comentaremos el final de la Carta a los Colosenses, con los saludos y recomendaciones finales y que firma Pablo personalmente después de la labor del amanuense. Además, comenzaremos a ver la Carta a los Efesios, donde Pablo hizo una gran labor con muchas conversiones y que motivó una vez más la persecución de los cristianos que allí había.
Comienza Pablo admitiendo la existencia y actividad buena y mala de los espíritus celestes, pero advierte de que solo en Cristo habita la plenitud de la divinidad corporalmente, recalca que solo Cristo redime: "Canceló la nota de cargo que había contra nosotros, la de las prescripciones con sus cláusulas desfavorables, y la suprimió clavándola en la cruz".
Vemos el final de la carta a los romanos, que es como un epílogo que invita a acogernos mutuamente y una preciosa doxología final. Además, comenzamos la carta a los Colosenses, una epístola eminentemente cristológica, con frases como esta: "Pues Dios tuvo a bien hacer residir en él toda la Plenitud, y reconciliar por él y para él todas las cosas, pacificando, mediante la sangre de su cruz, lo que hay en la tierra y en los cielos".
Pablo anuncia la vuelta de su pueblo judío a la fe, su conversión y aplicaciones morales. El culto espiritual, humildad y caridad en la comunidad. Sumisión a los poderes civiles, amor y socorro a los enemigos, etc. Y no juzgar a nadie.