Doncellas y demonio. El demonio aprovecha la vida en el Templo de la Virgen María con las doncellas para que éstas sean quienes ataquen y promuevan la expulsión del Templo de María. La Virgen responde con humildad a todos los ataques y al final se enteran los sacerdotes y maestra que aclaran que si no cambia tiene que abandonar el Templo. María reza y deja todo en Dios.