Hoy comenzamos la lectura de la meditación de 18 de febrero de 1938 de título "Tú, Señor, eres mi esperanza", dentro de la sección "Dios y mi alma". En esta ocasión el Hno. Rafael nos habla del hambre que pasa en la Trapa debido a su enfermedad, y de como toda su vida será, entonces, una cuaresma continua, y de como pide ayuda a Dios en la tentación delante del Sagrario.
En la segunda parte intentaremos aprovechar todo lo que nos propone el Hno. Rafael. En primer lugar vemos como acoge todos los sufrimientos espirituales y materiales que padece, aceptando la voluntad de Dios. Llega a llorar de hambre debido a la enfermedad, pero él se abandona en Dios pidiendo ayuda a Jesús y a su Santa Madre, sin que nadie llegue a saber de su sufrimiento
Terminamos hoy con la oración de Rafael titulada "¿Quién podrá explicar el amor de Cristo?"