En la presentación del informe sobre la libertad religiosa en el mundo, que confecciona "Ayuda a la Iglesia Necesitada", el sacerdote nigeriano que la realizó contó que cada domingo el fiel que acude a la iglesia sabe que puede morir por ir allí, pero añadió, "Yo no tengo miedo a que me maten , pero si a ser infiel a Jesucristo"